Con la mirada fija en lo olvidado:
Un suspiro involuntario llena el pecho.
La garganta se cierra y los ojos se llenan de lágrimas.
El cejo se frunce por posponer el llanto.
Entonces llora la nariz y tose uno desde la nuca.
La mirada sigue fija en lo olvidado.
¿Sera culpa?