Del diario XII



Hoy meteré mi corazón,
en caja de madera del sicómoro.
Lo tapare con hojas secas del guayabo.

Del patio, el cerezo intacto, celebra.
Y es que comparo esta belleza
(tuya)
con los más bellos años
de mi vida...

Que se alegra con tan poco,
que viene a ser todo,
lo que tengo.

Hoy momificaré lo vivido.
El futuro es humo asfixiante.
Tu eres sal de mis trozos.
Él es centinela, su Rajah (राजा).
Yo gozo y revivo de nuevo, tunante.

Más simple?

Que soy feliz con su sonrisa.
Que tengo recuerdos que valen la vida.
Que ella es premio, oro, llena valija.
Que hay otro.
Que si el sicómoro no aleja el gusano, muero.
Que ya es festivo, hoy y ayer.
Que mañana no importa.
Que no importa Él ni nadie
Sé y se sabe "que".

Pero lo queremos ignorar.

Por eso a veces he querido despedirme.
Dejar la piel como las serpientes
y ser:
Tal cual soy (dentro)
Cortar las sogas que alzan las banderas de lo que regresa.
Y que toda la lealtad a lo imposible.
se gaste como la lluvia.

Repito:
Que soy feliz con su sonrisa.
Que tengo recuerdos que valen la vida.
Que ella es premio, oro, llena valija.